Andrea Condemarín Fuentes (PRO), candidata a alcaldesa por Quinta Normal, declaró frente a la fiscalía respecto a su vinculación por el financiamiento de campañas electorales por parte de SQM al partido progresista (PRO), donde ella era la vicepresidenta de finanzas, partido de Enríquez-Ominami.
Condemarín, quien actualmente es vicepresidencia de acción social del partido, dijo que en su anterior calidad de jefa de finanzas su función era recaudar fondos para la colectividad, pero que nunca participó directamente en la campaña presidencial. “No sé quién fue el administrador de la campaña, como dije estaba más abocada a mis labores profesionales”. Y al abordar las finanzas del partido, aclaró que la “decisión de cómo se administraban los fondos durante el tiempo en que yo era la vicepresidenta de finanzas siempre fue de Warner en su calidad de secretario general y de Marco como presidente del partido, ellos decidían como se gastaban los fondos que el partido tenía”.
El ex administrador electoral de ME-O ya no realiza tareas para ninguna colectividad política. Esto, sería “incompatible” con su actual cargo: jefe de la División de Presupuesto y Finanzas de la Subsecretaría de Fuerzas Armadas, en el mismo ministerio que encabeza Gómez. A la cartera llegó el 23 de noviembre de 2015, prestando servicios a honorarios como contador. En marzo, y tras una recomendación recibida por la subsecretaria, Paulina Vodanovic (PS), fue designado jefe de división, con una remuneración de 6.282.430 pesos.
De las labores de Muñoz en la campaña de ME-O, dicen que habría llegado de la mano de Warner, y que habría trabajado cerca de este, del propio Enríquez-Ominami y de Patricia Morales, actual presidenta del PRO. Muñoz, sin embargo, precisa que trataba principalmente con Andrea Condemarín, ex vicepresidenta de finanzas del partido y actual vicepresidenta de Coordinación de Acción Social. En cualquier caso, en la tienda señalan que su perfil era técnico y no participaba en las discusiones políticas.
La fiscalía investiga pagos de la minera por más de $ 362 millones a la empresa de Cristián Warner, ex mano derecha de Enríquez-Ominami durante su campaña.
También, la fiscalía centro norte investiga el uso de un jet privado propiedad de unos empresarios brasileños y utilizado en forma de préstamo cuando ME-O era candidato presidencial, y que el asegura haber pagado por su utilización.
(fotografia del facebook de la candidata)
